martes, 7 de mayo de 2019

Compositores olvidados: Mieczysław Weinberg

Obra del pintor polaco Józef Pankiewicz (1866-1940), que curiosamente se titula "Terraza en Madrid".

Mieczysław Weinberg (1919-1996) fue un compositor soviético de origen polaco. Nació en Varsovia, de familia judía, y se inició precozmente en la música. Tenía 20 años cuando los nazis invadieron Polonia y se vio obligado a refugiarse en la Unión Soviética para sobrevivir. Sus padres y su hermana fueron asesinados en el campo de concentración de Trawniki. En Minsk estudió composición con Vassily Zolotaryov, discípulo de Balakirev y de Rimsky-Korsakov, pero tras la invasión alemana en 1941 se vio obligado a emigrar de nuevo a Tashkent, en Uzbekistán. Encontró trabajo en la ópera de esa ciudad  y allí conoció a Dimitri Shostakovich, forjándose una gran amistad entre ambos.

Shostakovich quedó impresionado con la  música de Weinberg, en concreto con su Sinfonía nº 1, y se refirió públicamente a él como "uno de los más asombrosos compositores actuales".  Aunque sus obras no fueron prohibidas cuando Stalin ordenó la condena de los formalistas en 1948, Weinberg, tal vez debido a su origen judío, fue una figura marginal para el medio musical soviético, y tuvo que ganarse la vida componiendo para el teatro, el cine y el circo. En 1953 fue arrestado por "nacionalismo burgués judío", pero la oportuna muerte de Stalin y la intercesión de Shostakovich permitieron su rehabilitación pública. No obstante, hasta la desaparición de la URRS no fue oficialmente reconocido en Rusia como un gran compositor.

La música de Weinberg posee obviamente una gran influencia de Shostakovich, pero también de Mahler y Prokofiev.  Weinberg puede encuadrarse dentro del romanticismo tardío, pero no renuncia a la modernidad y, como en la música de Shostakovich, hay en su obra una asombrosa fusión de música tonal y atonal. La obra de Weinberg, comprende 22 sinfonías, 17 cuartetos de cuerda, ocho sonatas para violín, un concierto para violín y orquesta, un concierto para violonchelo y orquesta, así como 40 partituras cinematográficas. Solo en 1994 se realizaron las primeras grabaciones de tan extensa obra.